Ayuntamiento de San Esteban de Nogales

San Jorge - 23 de abril

En la segunda mitad del siglo XIII, el monasterio de Santa María de Nogales se convierte en un centro espiritual al cual se debía acudir, al menos, una vez al año. Según afirma Gómez Moreno: el 16 de Agosto acudía gran concurso de gentes de toda la comarca, para confesar y comulgar, a fin de ganar las indulgencias concedidas por el Papa Inocencio IV en 1250, al extender la bula autorizando la consagración para este fin de la iglesia de Nogales. Como consecuencia del litigio entre el pueblo de San Esteban y el Abad del Monasterio, el asentamiento de la Ermita se fijó al otro lado del río Eria, para que hubiera que cruzar sus aguas.

En este sentido se ha perpetuado, hasta nuestros días, el ritual de la construcción en hacendera de un puente de madera aliso, que las crecidas del invierno arrastran cada añoLos orígenes de la ermita se remontan hacia principios del siglo XV.

Pronto se organizó una cofradía en honor al santo para la celebración de la fiesta: es aquí donde probablemente comience la historia de la Fiesta de San Jorge. José Carracedo, vecino del pueblo afirma al respecto: la cofradía, merced a las limosnas y donativos, disponía de algunas cabras, de una pareja de bueyes, de varios castrones... Con los ingresos obtenidos, la cofradía de San Jorge, que ya desapareció en el siglo XIX, hacía una gran romería, una gran fiesta en la ermita que agrupaba a gentes de Quintana del Marco, Alija del Infantado, que participaban con sus pendones en la fiesta.

Declarada de Interés Provincial. Construcción del puente de madera de aliso, procesión a la ermita, tradicional danza de palos, canto del ramo, muestra de folclore y representación callejera con pirotecnia de la leyenda de San Jorge y el dragón.

Otras fiestas

• 9 de mayo, San Gregorio Bendición de Campos.
• 15 de mayo, San Isidro Labrador.
• 15 de agosto, fiesta de la Asunción.

Uno de los aspectos singulares y único en la comarca lo aporta la vestimenta de los danzantes, donde se sintetizan rasgos árabes, celtas y latinos. Aunque el traje responde al modelo de vestuario referido en las características generales, posee ciertos matices distintivos, de los cuales se sienten muy orgullosos las personas del pueblo. Antiguamente, para vestir a un danzante se recurría a familiares, amigos y vecinos en busca de la prendas necesarias para completar el traje.

En la actualidad, la Asociación San Jorge ha reunido ocho vestimentas completas. El gran número de prendas, cintas, bandas y el material de lino hacen que dicha indumentaria pese bastante y sea incómoda. En palabras de José Carracedo: para llevar los trajes, que es lo más vistoso, se necesita ser joven, porque es todo el día y resulta cansado. El danzante debe permanecer durante todo el día en pie o sentado sobre una silla alta y sin respaldo para no arrugar la falda y estropear el almidonado. En definitiva, se trata de una prueba de resistencia y fuerza física muy relacionada con las danzas de espadas. Existen dos tipos de atuendo según el día: uno con bombachos para la víspera y otro con faldas para el día grande de la fiesta. El vestuario para el 22 de Abril se compone de camisa blanca plisada y almidonada de lino, por encima un chaleco de paño negro, con corte cuadrado y botones dorados; los bombachos negros están adornados con abalorios, cintas, lentejuelas y bandas de terciopelo.

La combinación de colores se produce entre el negro, blanco y rojo. Para el 23 de Abril, día grande, la indumentaria adquiere un colorido más llamativo destacando el color blanco sobre el rojo. Cada prenda del traje va unido con hilo y aguja, así son necesarias un montón de costuras para vestir al danzante. Este proceso dura aproximadamente entre tres y cuatro horas hasta que se completa el atuendo.

Este atuendo está formado por:

• Calzones largos, atados con un lazo por encima de la rodilla y adornados con puntilla y pasacintas. Por debajo del calzón se encuentra la liga sujetando la media y adornada con bolas de lana (madroños) de múltiples colores.
• Zapatillas blancas, (alpargatas de esparto) atadas con cintas blancas.
• Camisa de lino de color también blanco, anchas, plisadas y muy almidonadas en dobleces: tienen cuello redondo cerrado.
• Encima de la camisa blanca se sitúa la almilla, especie de chaleco blanco de hilo, donde se enlazan todos los adornos y accesorios: cintas, bandas, lazos... Las bandas están colocadas en forma de "M".
• Dos faldas blancas superpuestas, muy almidonadas, con entredoses y puntilla. Por encima un mandil rojo de "lanilla" con flores.
• A la cintura una faja roja donde se fijan las cintas. Esta faja está adornada con bordados de colores en fondo rojo.
• Cuatro rosetas, dos en los hombros y dos en la faja (una delante y otra detrás).
• Pañuelo rojo atado a un lado de la cabeza.
• Escapulario o estampa de la Virgen del Rosario colgado por una cinta en el pecho.